domingo, 26 de diciembre de 2010

wasrzawa ¿dónde estas?



varsovia es como una gran caja de música presidida por una espartana y sobria sirena de bronce que según cuenta la leyenda ordenó construir la ciudad a orillas del río vístula. es un lugar con marcado aroma alemán y hebreo, una ciudad que se busca en sus esquinas reinventadas, con decoración francesa, frío polar y melancolía rusa, una encrucijada entre el capitalismo lacerante, la omnipresente iglesia católica y algunas costumbres de la era comunista que hacen de esté páramo helado un contrapunto a las luminosas y bulliciosas calles del méxico que le precede.






















la ciudad me recibe helada, con un hermoso y terrible manto blanco ceñido a su bella y misteriosa silueta, a 17º bajo cero y costumbres que no dejan de sorprenderme, donde ya es obligatorio el gorro de lana tapando las orejas, los guantes, las bufandas, botas de goma para la nieve y un gran sentido del equilibrio para no patinar en sus congeladas aceras, en cuyos laterales se acumulan sobre la nieve botellas vacías de vodka y huellas sin nombre ni dirección, quizá de alguna de las 72 personas que en este crudo invierno ya han fallecido a consecuencia de esa mezcla explosiva de alcohol y frío.



el metro parece nuevo y extremadamente pulcro si lo comparamos con los meridionales, pero sobre todo me sobrecoge un silencio rayando lo sepulcral en sus vagones y estaciones, realmente incomprensible para quienes venimos del ruidoso sur.






















chopin es a varsovia lo que el ché a la habana, un icono nacional, la marca que delimita el alma de la ciudad, una ciudad absolutamente reconstruida y mártir, donde perecieron miles de personas durante la segunda guerra mundial, ciudad que hitler y himler habían soñado con destruir desde un principio y practicamente lo consiguen con el pretexto de sofocar el levantamiento polaco contra las fuerzas de ocupación nazi en 1944.



practicamente todo esta reconstruido, desde el palacio real a la muralla de la ciudad antigua, escrupulosamente reconstruido, y contrastando con su decadente belleza los altos edificios que se levantan entre los nuevos templos del comercio y el consumo en el centro comercial de la city.






















ahora varsovia se me antoja como un melancólico paseo, cuyas calles y plazas son como parte de un decorado cinematográfico, una realidad dentro de otra que no lo es menos, y sin querer se me viene a la cabeza y me seduce la letra de esa canción de jorge urrutia a coro con calamaro, loquillo y bumbury que lleva años persiguiéndome

http://www.youtube.com/watch?v=EBs06a8Shl0&playnext=1&list=PL0C4478D80CA2EEA6&index=1

"Dicen que estás muerta
las calles desiertas
del olvido
nunca sabrán que sigo el rastro de tu amor.

Sus amplias avenidas
le sirven de guarida
a tu corazón
nunca sabrán que sigo el rastro de tu amor,
nunca sabrán que sigo el rastro de tu amor.

¿Dónde estás? quiero verte, ¿dónde estás?
¿dónde estás? reina de mi soledad
¿cuándo vas a quererme?
¿cuándo vas a despertar del sueño de tu libertad, a despertar del sueño de tu libertad?

Ey nena, he pasado tanto, tanto tiempo buscándote, y la ciudad es tan grande pero tu amor tan pequeño.

Los ángeles del cielo
prendados de tu pelo
patrullan por la ciudad
nunca sabrán que me partiste el corazón.

¿Dónde estás? donde duermes, ¿dónde estás?
¿dónde estás? princesa de mi soledad
¿cuándo vas a quererme?
¿cuándo vas a renunciar al sueño de tu libertad, mostrando donde estás?

¿Dónde estás? quiero verte, ¿dónde estás?...¿Dónde estás? donde duermes, ¿dónde estás?.........¿Dónde estás? quiero verte, ¿dónde estás?..."