El pasado 25 de enero, Edita, el Encuentro Internacional de Editores Independientes que se celebra en Punta Umbría desde hace 20 años, recibió el Premio Progreso, que convocan la Fundación para el Desarrollo de los Pueblos de Andalucía, la FAMP y la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales de la Junta de Andalucía. Son muy pocos los festivales o encuentros que gozan de una trayectoria tan amplia, máxime si se tienen en cuenta los tiempos que corren y la escasa financiación que recibe, pero aún es más triste tener que recurrir a los datos económicos para justificar su viabilidad: por cada euro invertido, este encuentro deja diez en la provincia; alojamientos, restauración y transportes son algunos de los sectores que más se benefician del encuentro, pero no los únicos.
Edita mantiene, además, en Punta Umbría, un patrimonio bibliográfico único en su género, que por la naturaleza de sus contenidos y la calidad de las obras, posee un interés singular dentro del mundo del arte. Fondos de este archivo han servido para alimentar muestras y exposiciones en reconocidos espacios nacionales e internacionales del arte y la cultura, como el MACBA (Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona), La Casa Encendida de Madrid, el Centro José Guerrero de Granada, el Centro de Arte Contemporáneo de Sevilla, el CECUT Centro Cultural Tijuana de Baja California en México, y la Casa Museo Jardín Borda de Cuernavaca, también en México.
Con motivo del 20º aniversario, y para celebrar las 25 ediciones celebradas hasta la fecha, hemos organizado una exposición retrospectiva e itinerante sobre el encuentro, que junto a la realización de recitales, conferencias y la proyección del documental Una mirada a Edita, del colectivo granadino Jaula de Grillos, recorrerá, desde el 8 de marzo hasta diciembre de 2013, las ciudades de Barcelona, Granada, Valencia, Moguer, Málaga, Cáceres, Huelva, Sevilla, Bilbao, Lisboa y Loulé, en la Península Ibérica, y Sao Paulo, Medellín y Ciudad de México, en América Latina.
A pesar de su larga trayectoria, y contra todo pronóstico, la capacidad de convocatoria de Edita no sólo se mantiene en estos difíciles momentos, sino que crece y se extiende. Cada año aumenta el número de participantes que asisten al encuentro, y cada año se abren nuevas sedes, franquicias culturales que sirven como auténticas oficinas de promoción de Punta Umbría en el extranjero. Desde 2010 se celebra Edita anualmente en México y Colombia; en éste 2013 también en Brasil, y existen solicitudes para abrir sedes en Ecuador, Perú, Estados Unidos y República Dominicana.
Reconocimiento público, rentabilidad económica, creación y formación de patrimonio, o promoción turística, son tan sólo algunas de las bondades de un evento que, inexplicablemente, después de 20 años, continúa en la cuerda floja cada vez que se celebra. El Premio Progreso que nos acaban de conceder quiero entenderlo como un reconocimiento extensivo a la decena de festivales y encuentros de arte, música y literatura que existen en nuestra provincia, y también construyen y piensan Huelva, en su propio tiempo.
Más que un bonito epitafio, este premio debería ser un piloto de alarma para quienes tienen en sus manos la capacidad y responsabilidad de garantizar el progreso y la cultura, representada en esta ocasión por iniciativas que, como Edita, trazan y se quieren puentes reales hacia el futuro.
